En esta semana casi monotemática de blogs, me he propuesto ampliar un poco más el radio de las bitácoras vecinales, y hacerme eco de una de las tendencias que con más furor se extienden entre los autores de estos diarios digitales (y no solo entre los más jóvenes). Me refiero a los cada vez más numerosos espacios de protesta en los que los habitantes de una determinada localidad toman posición y denuncian los distintos problemas municipales. En este caso ya no hablaríamos de bitácoras de un determinado barrio o población sino de especies de agregadores que acogerían a todas las protestas locales.
En febrero de 2007 se lanzó en pruebas un sitio que supuso un antes y un después de este tipo de blogs. Se trata de Fix my street, un portal donde los ciudadanos británicos pueden denunciar problemas que les afectan o preocupan, como graffitis, baches, aceras deterioradas o basura sin recoger. Posteriormente, el sitio informa a los ayuntamientos de las «denuncias» y, con la ayuda de los usuarios, actualiza el estado del problema.
Ante el éxito que tuvo esta iniciativa, unos meses más tarde se lanzó en España el portal Arregla mi calle, en el que, bajo el lema «si el ayuntamiento olvida, la comunidad recuerda», se invita a todos los ciudadanos que quieren denunciar el mal estado de sus calles o barrios a que participen en este canal de comunicación entre los ayuntamientos y los vecinos. Eso sí, este portal aún no ha logrado instalarse entre las preferencias de los internautas y, por lo visto en la web, tampoco hay gallegos que se hayan lanzado a dejar sus quejas.
¿Será, quizás, porque ya han surgido en la comunidad webs que aglutina estas reproches? Esta redactora, al menos, conoce una, eso sí, centrada, sobre todo, en las protestas concernientes a lugares poco accesibles. Desde Tu queja vecinal se anima a los gallegos a que retraten chapuzas urbanísticas de los espacios públicos…
Seguro que esto post continuará.