La Voz de Galicia
Serantes
Tecnología y productividad en movilidad
Seleccionar página

Plataformas móviles

Durante los últimos meses hemos asistido a un progresivo «cierre» de los servicios de Google. No me refiero tanto a la cancelación de servicios como Google Reader sino más bien a cómo Google está dejando de ser un proveedor de servicios disponibles en cualquier plataforma para ir construyendo una plataforma propia. Los servicios de Google forman ahora un «ecosistema» cada vez más claro e integrado, pero a la vez más cerrado. Durante la Google I/O celebrada de la semana pasada se presentaron diversas novedades, pero quizás las más significativas en este sentido fueron la unificación de sus servicios de mensajería a través de Hangout (directo a la yugular de WhatsApp, Line y otros), el servicio de música mediante suscripción All Access añadido a Play Music (que compite con otros como Spotify o Rdio), la potenciación de Play Books gracias a la posibilidad de subir contenidos propios (un saludo a Amazon) y la posibilidad de realizar pagos como si añadiésemos un archivo adjunto a un correo electrónico (seguro que esto «le ha encantado» a Paypal). La mayoría de sus aplicaciones y servicios de Google ya solo están disponibles para Android e iOS, pero no es descartable que a medio plazo veamos un menor interés por iOS.  Por supuesto, de Windows Phone y Blackberry nos olvidamos completamente en este sentido.

Plataforma Google

La integración de la «plataforma Google» es tal que lo de utilizar un ordenador equipado con Chrome OS ya no es una quimera sino que se parece una opción perfectamente plausible a medio plazo para cierto tipo de usuarios.

Por su parte, Apple siempre ha sido como la «nueva Google» y ha apostado por una plataforma cerrada y muy bien integrada, pero con pocas o nulas posibilidades de usar sus servicios con otros dispositivos. Cabe recordar en este sentido cómo reaccionó Apple cuando Palm intentó que su Palm Pre pudiese sincronizar los archivos de música con iTunes (una compatibilidad que anularon una y otra vez hasta que Palm desistió).

Jobs iTunes

Lo previsible pues es un futuro en el que compremos y almacenemos nuestros contenidos en uno u otro lugar ya no tanto por las condiciones que ofrezcan iTunes/App Store o en Google Play sino más bien por el tipo de dispositivo (iOS o Android) que utilicemos habitualmente. En este entorno probablemente se quedarían fuera algunos servicios independientes (como alguno de los citados anteriormente), pero quizás el que más se vería afectado es el negocio de Amazon. Software, música, libros, películas… el abandono del soporte físico es cada vez mayor y, de hecho, prácticamente se ha completado en la mayoría de los casos. Esto, unido al uso cada vez mayor de dispositivos móviles, hace que el «cierre» de las principales plataformas ponga en serio peligro la posición de Amazon. Desconozco las ventas de la tienda de aplicaciones para Android de Amazon, pero intuyo que deben ser más bien anecdóticas al margen de los usuarios de tabletas Kindle Fire. Por otro lado, el éxito de las distintas tabletas probablemente haga que la venta de e-readers Kindle se vea afectada durante los próximos años, lo cual a su vez podría poner en peligro la supremacía de Amazon en su negocio tradicional de la venta de libros.

Amazon Cloud

En definitiva, estamos perdiendo una opción multiplataforma a la vez que ganamos una interesante plataforma cerrada. Queda pues un espacio vacío y varios actores buscando su lugar. Parece que lo lógico sería que empresas como Amazon ocupasen ese espacio reservado para un proveedor de productos y servicios (sincronización de datos personales, archivos en la nube, música, vídeo, libros…) disponibles para la mayoría de las plataformas. De hecho, esto ya lo hace con su aplicación Kindle de libros electrónicos, que por este motivo probablemente siga siendo el mejor sitio para comprar libros si queremos utilizarlos en diversos dispositivos. Aquí podríamos meter a muchas otras empresas como Dropbox o Yahoo, que parece haber revivido a la vez que potencia su consideración entre los usuarios (véase el favorable recibimiento de su renovado servicio Flickr o las tibias críticas a la adquisición de Tumblr). Otro ejemplo sería el de Facebook, que sí muestra su interés por estar presente en las distintas plataformas, aunque no lo haga en todas con el mismo esfuerzo. Por otro lado, otros participantes como Microsoft (con Windows Phone) y Blackberry seguramente estarían encantados de que se desarrollase esta «tercera vía» ante la posibilidad de quedarse aislados si no fuera así.

Windows Phone y Blackberry

Cada vez soy más escéptico respecto a las posibilidades de que los sistemas operativos móviles Windows Phone y muy especialmente Blackberry alcancen una cuota de mercado mínimamente significativa como para garantizar su subsistencia como alternativa real. Sin embargo, la colaboración entre estas plataformas y proveedores de servicios, juntos pero no revueltos, sí que podría dar lugar una tercera vía muy interesante cuyo principal valor fuese la disponibilidad de los productos y servicios en la mayoría de los dispositivos.

¿Tú cómo ves el futuro de las plataformas y servicios en movilidad?

 

Saludos,

Doálvares