Pues aquí estoy, de nuevo en el «coso-blog», y no precisamente después de unas vacaciones relajadas -he tenido a mis papis de visita una semanita- pero dispuesta a lidiar de nuevo con toros, vaquillas y lo que se tercie.

La labor de Cicerone ha ocupado casi todo el tiempo, desde la mañana a la noche, llegando a casa con las fuerzas en reserva y aturdida por la mezcla de idiomas (ingles, español y turco -en fase tarzán nivel 2-) lo que me debaja poco tiempo para leer el blog, casi ninguno para añadir comentarios y cero para escibir alguna entrada… Después de recuperarme de las vacaciones (hay de todo en esta vida) he decidido que ya era hora de daros la tabarra un ratito y me he puesto a ello, para contaros algo, aunque aún no se muy bien qué…
Empezaré por comentaros que la imagen que ilustra mis palabras, es una servidora escaqueando unos minutillos despues de un supersabrosisimo «breakfast», con mi recién llegada N770, no sin alguna otra cara de desaprobación -por parte de la family- ante mi «fanatismo»…. os suena, no? Pues nada chicos, que sepáis que no sois los únicos «chalaos», que siempre reconforta, y como prueba de ello, véase el detalle superior del intento de disimulo… 😛

La verdad es que aún no he tenido mucho tiempo para cacharrear, pero ya he hecho mis pinitos, y tengo deciros que nos llevamos a las mil maravillas… bueno, a veces se me atraganta un poco la pobre; lógico, acostumbrada al MacBook Pro, empiezo a abrir aplis como una posesa hasta que me dice «frena mariano que nos la pegamos». Pero se porta muy bien, y como ya sabéis, en esta ciudad las redes son abundantes -como la comida, casi- y conectarse es fácil; así que leer el correo, navegar y chatear, es posible en -relativamente- cualquier sitio (a no ser que una, tengas a la familia de visita 😉 o te muevas más que los precios).

A su favor diría que: la batería aguanta como una campeona; el tiempo en abrir aplis es soportable -y una vez abiertas fenomenal; la navegación también rápida -para lo que es-; la manejabilidad cómoda; la configuración fácil para novatos (aquí incluyo el -tan importante para mi- cambio de idioma) y el brillo de pantalla aguanta solete de pleno.
En contra puedo decir que: me molesta bastante la lentitud en conectarse via WiFi (se lo piensa, la tía…); me resulta algo engorroso acceder a las aplis, por no decir que no se pueden configurar los iconitos de la izquierda -con lo que me gusta- y la verdad es que poco más, aunque bien es cierto que aún no la he sincronizado con el ordenador, no se por qué tengo una especie de «no sé qué y qué sé yo, que yo qué sé»… por qué será?… 😀 Pero todo llegará y ya os lo contaré.

Y a falta de más inspiración, me despido hasta la próxima, espero que esa depre postvacacional no os haga mucha «pupa».

Saludos

Nacu

P.D.: Tengo que decirlo… ¡Faltan menos de dos meses para que llegue el iPhone!!