He de reconocer que la primera vez que vi un equipo híbrido, mitad portátil, mitad tableta, equipado con Android, me pareció una idea absurda. Al usar tabletas con el sistema operativo Android en ocasiones me sentía como si estuviese utilizando sistema operativo para móviles en un equipo demasiado grande para ello, por lo que en algo que me hiciera recordar a un portátil, esta sensación solo podía empeorar. Sin embargo, tras las buenas sensaciones que me había dejado el HP Envy X2, cuando vi que HP lanzaba una versión «androide», el HP Slatebook X2, supe que había llegado el momento de probar este concepto. A continuación os presento mis impresiones tras unas semanas de uso de este equipo del que ya hice una pequeña introducción en el capítulo 101 de nuestro podcast.

RESUMEN DE LAS ESPECIFICACIONES

• Sistema operativo: Android 4.2.2

• Procesador Nvidia Tegra 4 de 1,8 Ghz

• 2 GB de memoria RAM

• 32 GB de capacidad, ampliable con tarjetas microSD, SD y memorias USB

• Cámara frontal de 720p y trasera de 2 MPx (sin flash)

• Wifi b/g/n, Bluetooh y Miracast para conexión a pantallas compatibles.

• Panel IPS de 10,1” y resolución de 1920 x› 1200 (224 ppp)

• Dimensiones: 19,38 x 25,8 x 2,05 mm (total); 18,22 x 25,8 x 0,96 mm (solo tableta)

• Peso: 1,27 kg (total); 610 g (solo tableta)

DISEÑO Y CARACTERÍSTICAS

El HP SlateBook X2 retoma el concepto de los Asus Transformer y se presenta como un equipo a medio camino entre una tableta y un portátil. La tableta está equipada con un procesador Nvidia Tegra 4 de 1,8 Ghz y 2 GB de memoria RAM. Entre sus características encontramos también una ranura para tarjetas microSD, un jack para auriculares y el puerto de conexión y carga, además de los interruptores de encendido/apagado y de aumento y reducción del volumen. Por otra parte, este equipo dispone también de una cámara trasera de 2 MPx (que no nos dará grandes alegrías) sin flash y una frontal de 720p.

La calidad de imagen de la tableta es buena, sin llegar a ser asombrosa ni insuficiente. El único problema que he detectado en este sentido es su aspecto ligeramente amarillento cuando el brillo se ajusta a un nivel bajo. Los altavoces, colocados en la parte frontal, cuentan con la tecnología DTS Sound+ y me han parecido correctos para tratarse de una tableta, si bien se habría agradecido algo más de potencia y calidad del sonido, como la que ofrece el Envy X2.

Además de la tableta en sí, este equipo se complementa con una base-teclado que, una vez acoplada, hace que el equipo resultante más parezca un portátil (o más bien un netbook). Además del teclado en sí, la base incluye una batería de 2960 mAh (que se suma a los 3375 mAh de la batería de la tableta). Los puertos inferiores de la tableta quedan ocultos, totalmente inaccesibles, al conectar las dos partes del equipo, lo cual no supone un problema ya que estos están replicados en la base. Ahí encontramos un nuevo jack para auriculares, una nueva ranura para tarjetas de memoria (en este caso, para tarjetas SD), un puerto USB al que podremos conectar memorias y otros accesorios, un nuevo puerto de carga y un puerto HDMI que nos permitirá conectar nuestro equipo a un monitor externo o a un televisor.

El peso de la tableta (610 g) es muy similar al del iPad 4. Al añadir la base nos vamos a 1,27 kg, un peso más propio de un netbook o ultrabook, y quizás por ser un equipo compacto la sensación que nos da es que pesa algo más de lo que esperaríamos. Seguramente en esto también influye que al pensar en Android nuestras expectativas respecto al peso se vinculan más a lo habitual en una tableta que en un ordenador.

EXPERIENCIA DE USO

Quizás una de las cosas que más me ha sorprendido de este equipo ha sido el teclado y las múltiples posibilidades que ofrece. Gracias al tamaño de sus teclas, al amplio espacio disponible entre estas y la pantalla y a la posibilidad de variar a nuestro gusto el ángulo de la pantalla (la tableta), con este equipo podremos escribir con la misma comodidad que cuando usamos un portátil, algo completamente diferente a la experiencia de usar una tableta conectada a un teclado externo (generalmente minúsculo) mediante Bluetooth. Por otra parte, el teclado incluye diversas teclas de función que nos facilitan enormemente el manejo del sistema y las aplicaciones, como por ejemplo teclas de inicio, ajustes, acceso a la multitarea, volver atrás, búsqueda e incluso una tecla dedicada a la realización de capturas de pantalla (el habitual «Impr Pant» de los portátiles). Si bien las teclas son algo más pequeñas que el tamaño estándar, el teclado resulta muy cómodo para escribir, si bien se agradecería que fuese retroiluminado. La base incluye asimismo un trackpad multitáctil (algo pequeño pero con una mejor respuesta de lo que esperaba) y la pantalla obviamente es táctil, por lo que siempre tendremos varias maneras de realizar distintas funciones y la posibilidad de elegir la que nos resulte más cómoda.

De los grandes sistemas operativos diseñados para móviles, Android es sin duda el que más recuerda a un sistema de escritorio. El hecho de disponer de un sistema de archivos “visible” para el usuario y las múltiples posibilidades de Android ayudan también a que con este equipo nos sintamos como si usáramos un portátil. Esto sitúa al HP SlateBook X2 como un equipo realmente interesante para quienes necesiten algo más que una tableta pero sin llegar al extremo de optar por un portátil clásico con sistema operativo de escritorio.

Otro de los elementos que nos recuerda a los portátiles es la gestión de usuarios. Al contrario de lo que sucede con otras tabletas, como el iPad, a partir de la versión 4.2 para tabletas Android permite configurar distintos usuarios con perfiles, cuentas y archivos completamente separados, algo que en más de un hogar se agradecerá.

RENDIMIENTO, ALIMENTACIÓN Y AUTONOMÍA

El sistema se ha mostrado realmente fluido durante las pruebas, tanto para navegar como para ver películas o utilizar aplicaciones de productividad. Me ha gustado especialmente la fluidez en el cambio de aplicaciones, un elemento más que nos vuelve a acercar a la experiencia de uso de un ordenador.

Desgraciadamente, este equipo utiliza un puerto de carga exclusivo de HP. Por ello, no solo tendremos que llevar encima el cargador específico de este equipo cuando vayamos a trabajar en movilidad durante mucho tiempo, sino que además nos encontramos con el problema de que este cargador y el cable del enchufe son algo grandes en comparación con lo que encontramos en cualquier tableta. En este sentido, este equipo también se sitúa más cerca de los netbook que de las tabletas convencionales.

No puedo ofrecer datos totalmente exactos sobre la autonomía, pero con la conexión wifi activada y el brillo a nivel medio, la tableta me ha durado de media algo más de seis horas, cerca de nueve en caso de acoplar la base-teclado.

Por su parte, el sistema de gestión de la energía me parece un acierto, ya que al enchufar el equipo vemos que ambas se van cargando a la vez, si bien el sistema le da una clara prioridad a la carga de la tableta. Por el contrario, mientras estemos usando el equipo sin enchufar a una toma de corriente el sistema recurrirá primero a la carga disponible en la base, de manera que si separamos el equipo para usar la tableta de manera independiente esta siempre estará cargada al 100 %, a no ser que ya hubiésemos agotado toda la carga de la base.

ENVY X2 Y SLATEBOOK X2. PARECIDOS, PERO MUY DIFERENTES

Podríamos pensar que los modelos Envy X2 y SlateBook X2 de HP solo se diferencian en el sistema operativo (Windows 8 Pro frente a Android), pero la realidad dista de ser así. En el caso del Envy estamos hablando de unos acabados de bastante alta calidad, mientras que en el caso del SlateBook son correctos, pero sin ir más allá. Dicho esto, hay que tener muy en cuenta que en el primer caso estaremos comprando un modelo que salió al mercado por un precio de 1000 EUR frente a otro cuyo precio oficial es de 479 EUR, en ambos casos con la base-teclado incluida. No suele ser difícil encontrar algún cupón de descuento del 5-15 % para productos de HP, en la propia página del fabricante o en otras, por lo que es perfectamente factible conseguir este modelo por poco más de 400 EUR.

CONCLUSIONES

¿Recomendaría este equipo a alguien? Como siempre, depende de para qué se vaya a utilizar. Las soluciones híbridas siempre representan un arma de doble filo, ya que nos aportan una mayor flexibilidad pero esta viene de la mano de algunos de los problemas de los dos extremos entre los que se sitúan. Por ello, a quien realmente necesite una tableta y solo vaya a usar el teclado de manera puntual sin duda le recomendaría que buscase un modelo más específico para, en caso necesario, combinarlo con un teclado Bluetooth. A quien claramente necesite un ordenador, este equipo se le quedará corto en ciertos sentidos. Dicho eso, para quien busque algo más que una tableta (por comodidad de uso, capacidad de ampliación, conexión a otros periféricos…) sin llegar a necesitar un ordenador completo, el HP SlateBook X2 es sin duda un equipo que debería estar en su lista de candidatos.

En cuanto a los componentes y acabados, dejando de lado el rendimiento (que es realmente bueno), en la mayoría de las ocasiones la valoración es «correcto, pero sin grandes alegrías». HP ha conseguido hacer un equipo muy correcto en este sentido sin subir demasiado el precio, pero si en una próxima versión aumentase un poco la calidad de los acabados estaríamos ante un equipo realmente interesante. Para una futura revisión sería de agradecer también la inclusión de un puerto micro-USB en la tableta que pudiéramos utilizar para cargarla en movilidad cuando no necesitemos llevarnos también la base.

Saludos,

Doálvares