La Voz de Galicia
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Vila-Matas: «De haber hecho cine, me habría parecido a los Coen»

En su última novela, , Enrique Vila-Matas (Barcelona, 1948) salta de Dublín a América en la enésima vuelta de tuerca del autor a su obra única.
—Después del «salto inglés» de «Dublinesca» ahora emprende una especie de «salto americano».
—Se puede decir también que de la Odisea dublinesa (Ulises) he ido a parar a mi barrio de Barcelona (Ítaca), porque es en ese barrio poco conocido de mi ciudad (la calle Buenos Aires y alrededores), donde suceden gran parte de los hechos que narra mi novela.
—Digo lo del «salto americano» porque también hay aquí una atmósfera del cine de los hermanos Coen, de esa capacidad que tienen de hallar y de narrar lo asombroso (y a veces lo monstruoso) en medio de lo cotidiano, que precisamente es otra clave de su obra.
—Para ciertos momentos de la novela tuve presente  de los Coen. Un «salto americano» en la calle … Seguir leyendo

Grandes: «Sólo vamos pisando la hierba que Galdós pisó primero»

Tras contar la invasión del valle de Arán en Inés y la alegría, Almudena Grandes (Madrid, 1960) vuelve a echarse al monte en El lector de Julio Verne, segunda entrega de Episodios de una guerra interminable. Grandes trepa ahora a la Sierra Sur de Jaén para relatar las andanzas de Cencerro y su guerrilla durante el trienio del terror (1947-1949).

—¿Ha querido crear con estas novelas unos «episodios nacionales» de la posguerra?
—Claro, esa era mi intención desde el principio: adoptar y adaptar el modelo de los Episodios nacionales de Galdós en el sentido de que en estos libros lo que yo hago es inventarme una historia de ficción para encajarla en el marco de un acontecimiento histórico real, de tal manera que los personajes que intervinieron en la historia real, en este caso Cencerro, Marzal o el alcalde vitalicio de Valdepeñas… interactúen dentro de la novela con mis … Seguir leyendo

O dicionario vermello

Aínda conservo a sétima edición daquel Diccionario Galego-Castelán de X. L. Franco Grande coa capa vermella. Está forrado, como todos os libros da escola, e leva escrito na primeira páxina, coa caligrafía infantil da EXB aínda lexible, o meu nome e, debaixo, un 6.º A que delata o curso no que comezaron, na miña infancia urbanita ata as cachas, as clases de galego no cole. O volume, rematado de imprimir no prelo da editorial Galaxia o 15 de xaneiro de 1982, cumprirá mañá trinta anos e, malia os cambios de normativa e de política lingüística polos que cruzou o galego durante estas tres décadas, segue a constituír un fermoso tesouro do idioma, porque é un dos contados compendios nos que un pode atopar aínda aquelas palabras que, sen axustarse estritamente ás leis oficiais, seguen habitando as páxinas dos libros antigos e o galego oral.
No dicionario vermello eu aprendín a … Seguir leyendo

Nicanor Parra, la vida en palabras

Nicanor Parra aterriza en la literatura, como Ernesto Sabato, Robert Musil, Alexander Solzhenitsin y otros acróbatas de la existencia, procedente de las galaxias de la física y de los campos transfinitos de las matemáticas. Llega Parra a sus palabras, a sus trastos de escribir y sus metáforas, bañado en la luz insondable de los fotones y aplastado por el vértigo cósmico que únicamente conocen quienes se han asomado, aunque solo sea con un bolígrafo y una libreta llena de garabatos, a los agujeros negros y sus madrigueras esféricas. Un día el físico emerge de su materia oscura, del reverso del universo en expansión, y salta sin titubeos de la antimateria a la antipoesía, que no es lo mismo, pero casi.
Su antipoesía, como la de Bukowski, es la vida en palabras, esa crónica pendenciera y deslenguada que fluye desde el Arcipreste a Quevedo y Villon hasta desembocar en Franz Kafka, … Seguir leyendo

Libertad, de Franzen

Libertad es una gran novela. Incluso podría decirse que es una novela extraordinaria por su inteligente introspección en el paisaje humano y moral de la sociedad norteamericana contemporánea. El aclamado autor de Las correcciones, Jonathan Franzen (1959), planta su microscopio sobre la familia Berglund y, a lo largo de casi setecientas páginas, exhibe músculo y neuronas para componer un minucioso retrato de ese mundo fragmentario y de «pensamiento sin centro» en el que habitan Walter, Patty, Jessica y Joey Berglund y la entrañable fauna que orbita a su alrededor, entre la que sobresale el golfo roquero Richard Katz, amigo del paterfamilias Walter desde la Universidad (pequeño detalle que no impide que tenga un fulminante lío con su desnortada esposa Patty).

El único problema con Libertad y sus precisos engranajes narrativos es que a los chicos de
márketing se les ha ido la mano (por decirlo muy suavemente) con la … Seguir leyendo