La Voz de Galicia

La metáfora del Hermoso Velero (2)

“La gaviota se despierta y me sigue hablando del Hermoso Velero en el que muchos hombres sirven aún de marinos. Hombres que no llevan guantes para sentir mejor la vida de los cabos y de las velas, que van descalzos para conservar el contacto con su barco, tan grande, tan hermoso, tal alto, cuyos mástiles llegan hasta el cielo. Hablan poco, observan el tiempo, leen en las estrellas y en el vuelo de las gaviotas, reconocen los signos que les hacen los delfines. Y saben que su Hermoso Velero avanza hacia la catástrofe.
Pero no tienen acceso al timón, ni a las velas, montones de hombres descalzos mantenidos a distancia de bichero. Se les dice que huelen mal, que vayan a lavarse. Y muchos han sido colgados por intentar cazar las escotas de las velas de popa y lascar las de las velas de proa para modificar siquiera un poco … Seguir leyendo

La metáfora del Hermoso Velero

Prometeo me regaló el viernes tres libros de Moitessier. Ayer anduve sobándolos, sin atreverme a empezar ninguno. Me detuve en las dedicatorias, en las fotos. Recalé un momento en la página ciento y mucho de «El largo viaje» y ya no pude dejarlo. En la 208 cuenta que una pequeña gaviota blanca, casi transparente, una golondrina de mar, se posa sobre su rodilla. Él no se atreve a moverse. La gaviota termina por dejarse acariciar y…
 Dice: «Me cuenta la historia del Hermoso Velero cargado de seres humanos. De cientos de millones de seres humanos.
A la salida se trataba de un largo viaje de exploración. Esos hombres querían saber de dónde venían y a dónde iban. Pero se habían olvidado completamente de por qué estaban en ese barco. Entonces, poco a poco, fueron engordando, se volvieron unos pasajeros exigentes, la vida del mar y del barco dejó de … Seguir leyendo