La Voz de Galicia

Salud a crédito

La idea de que el sistema sanitario es insostenible se repite con insistencia creciente desde mucho antes de la crisis y parece que responde a la realidad. Hasta ahora consideraba que podría tratarse de un mero problema de gestión, de introducir racionalidad en los recursos, pero desde hace un tiempo se me dio por pensar que utilizamos el sistema de salud para financiar un modo de vida a menudo arriesgado. Así como antes pedíamos créditos para ir de vacaciones, ahora aceptamos el botellón porque confiamos en el servicio de urgencias. Por casualidad, esta semana di con unos datos que avalan la hipótesis.

Por lo visto, ya en 1974 se establecieron cuatro determinantes básicos para la salud de la población: el biogenético (carga genética, envejecimiento, etcétera), el ambiental (contaminación física, química, biológica, social y cultural), los estilos de vida y conductas de salud (drogas, sedentarismo, nutrición, violencia, estrés) y el sistema … Seguir leyendo

Cosas raras

En los últimos meses no hacen más que pasarme cosas raras que atribuía a un suceso de salud acontecido en enero. Pero continúan, y resulta cada vez más complicado vincularlas con la cardiología. La última consiste en que he dejado de entender los periódicos. Literalmente. Salvo este en el que escribo, no sé de qué van. Hablan para otros, sobre cosas que me importan un bledo. Y si hablan para mí, me toman por tonto.

No es del todo nuevo. Siempre me ha sucedido en alguna medida. Lo nuevo es el descaro y la chapuza. Por ejemplo, un diario de derechas dice que en la asignatura alternativa a Religión se impartirán los valores de las víctimas del terrorismo. Me asusto. Leo la noticia como un bobo y no hay más que aire, la nada a doble página.

Cojo el flamante periódico de izquierdas, tan serio él, y leo en otra … Seguir leyendo

Perderse

Hay carreteras por las que pasas mucho, quizá todos los días, y te acostumbras. Acostumbrarse tiene algo de bueno y bastante de malo, porque significa acomodarse, encontrarse confortable con algo o con alguien, y eso está bien. Pero una preposición muestra nítida la diferencia entre hacer las cosas de costumbre y hacer las cosas por costumbre. Lo hecho solo por costumbre deja de verse, de percibirse, de sentirse.

Me di cuenta ayer al volver al periódico después de presenciar en Acea de Ama los ensayos de la Fiesta Voz Natura que se celebra hoy. Me equivoqué de camino y, por costumbre, emboqué en automático un recorrido innecesariamente largo. Ya en él, me dejé ir, pero se me ocurrió de repente una idea para acortarlo y, además de equivocarme de nuevo, me perdí. Gran suerte, porque pude transitar por pistas desconocidas en territorio conocido. Conducía algo atontado y enseguida me espabilé, … Seguir leyendo