La Voz de Galicia
Hablando de riqueza, pobreza, exclusión y con quienes no quieren quedarse al borde del camino
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La noticia me ha sorprendido:

El Gobierno de Senegal ha anunciado una ayuda de 325.000 euros para el Instituto Universitario de Enfermedades Tropicales y Salud Pública de Canarias.

Las razones de su director, Basilio Valladares, son claras: «Somos un centro como muchos otros que estamos buscando financiación por diferentes vías. Es la primera que se ha conseguido y se está en conversaciones con otros países como Guinea Ecuatorial, Cabo Verde, Nigeria y Angola. El acuerdo con Senegal representa una pequeña proporción del total de nuestros fondos para investigar e irán destinados a proyectos de investigación centrados en enfermedades del país africano. Además de la continuidad de las investigaciones, la ayuda senegalesa se destinará a la formación de personal y a la instalación de laboratorios en ese país que serán el germen de un instituto científico propio»

¿Es una mala noticia?

Algunas reacciones son algo molestas: vergüenza que nos financie un pais pobre, pena por el prestigio perdido, a esto nos lleva la corrupción, melancolía por lo que nosotros fuimos en cooperación y míranos ahora…

Quizá sea oportuno felicitar al Instituto, la Consejería de Acción Exterior del Cabildo de Tenerife y el propio gobierno senegalés. Por acciones como esta puede pasar en parte el futuro de la cooperación al desarrollo.

Entiendanme bien, es despreciable el desmantelamiento canalla de los fondos de lucha contra la pobreza dentro y fuera de España y el sufrimiento que está causando en millones de personas, además de una ruinosa pérdida de oportunidades para el desarrollo. También lo es el suicidio futuro que como pais nos estamos asegurando al erradicar adrede presupuestos de Investigación, Desarrollo e Innovación (I+D+i) en esta carrera loca por volver a los años 60, al «que inventen ellos» y al «capitalismo de amiguetes«.

Pero para llorar siempre hay tiempo y mientras resistimos está bien ver cómo innovar buscando formas de financiación, con modelos de cooperación más horizontales que la habitual verticalidad (¿la del 0,7% ?).

Horizontal porque se aprovechan los recursos humanos técnicos propios y se refuerza su papel, porque se asegura la implicación del gobierno de Senegal (¿no es este uno de los principios de la Declaración de París?) y su exigencia de resultados por la cuenta que le trae, tanto los propios de la investigación como la formación de personal local. Y si algún día los investigadores canarios tienen que irse a vivir a Dakar porque el gobierno español o canario siguen con la incompetencia de no financiales, tendrán un futuro rodeados de compañer@s senegaleses.

…Por cierto, quizá así aprendamos del ejemplo y en vez de tener a muchos inmigrantes senegaleses malvendiendo en nuestras aceras empecemos a verlos como posibles responsables de exportación en nuestras empresas. Espíritu, iniciativa  y capacidad no les faltan.

Horizontal porque es mucho lo que, a nivel personal, pero también organizaciones e instituciones españolas han aprendido y sobre todo pueden aprender de como gestionar mejor con muchos menos recursos y en condiciones sociales y políticas difíciles. Muchas de las llamadas contrapartes (socios en el pais de destino) saben de sobra como enseñarnos a luchar contra la pobreza y la desigualdad manteniendo la dignidad de las personas.

Positiva porque trabajando juntos se puede acceder a nuevas fuentes de financiación (como así se apunta desde el Instituto y como ya están haciendo algunas ONG de acción social espabiladas): de instituciones públicas multilaterales, fundaciones privadas, etc. Avergonzando así de nuevo a nuestros gobiernos por no hacer lo que debieran y dejar a su suerte la viabilidad de proyectos solventes que han financiado históricamente.

Tomemos ejemplo. Es muy triste el desmantelamiento de la política de cooperación al desarrollo de la Xunta de Galicia, por ejemplo, como la de otras comunidades autónomas. No repito de nuevo las razones evidentes de lucha contra la pobreza, pero si añado la escasa visión estratégica y de futuro, por la pérdida notable de vías de colaboración, de obtener nueva financiación multilateral y oportunidades de aumentar nuestra presencia en el exterior y de hacerlo favoreciendo el desarrollo de muchas personas.

Es inmenso y ya demostrado en múltiples casos, el potencial de organizaciones, instituciones, universidades, empresas, etc. y de muchos gallegos y gallegas para poder impulsar proyectos de cooperación con otros países, beneficiandose ambas partes: agua, pesca, desarrollo forestal, salud, consultoría, ingeniería, servicios sociales…

Que cooperen ellos. Es más cómodo.

Pero mejor tomarlo con un poco de humor: Africa: Ya estás ayudando a Noruega. ¡Ahora nos toca a nosotros. No nos falles!!

Les recomiendo ver el video directamente en Youtube, con subtítulos en castellano. ¡Y con los altavoces puestos para cogerse de las manos al escucharlo!

@xosecuns

No nos pidan calma (en Facebook)